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Sesgos cognitivos en la toma de decisiones

Sesgos cognitivos en la toma de decisiones

Resulta muy común que nos veamos envueltos en sesgos cognitivos en la toma de decisiones sin que nos demos cuenta. Esta circunstancia tan habitual puede llevarnos a tomar decisiones impulsivas o basadas en emociones en lugar de datos objetivos. Los sesgos cognitivos son patrones de pensamiento que pueden afectar nuestra percepción y juicio en diferentes situaciones. Es importante ser conscientes de estos sesgos para tomar decisiones más informadas y racionales.

Puntos importantes

¿Qué son los sesgos cognitivos?

Los sesgos cognitivos son atajos mentales que nuestro cerebro utiliza para procesar la información de manera más eficiente. Sin embargo, estas atajos pueden llevarnos a tomar decisiones equivocadas y distorsionar nuestra percepción de la realidad.

Existen muchos tipos diferentes de sesgos cognitivos, cada uno de los cuales influye en nuestro pensamiento y comportamiento de manera única. Algunos de los sesgos cognitivos más comunes incluyen:

Sesgo CognitivoDescripción
Sesgo de ConfirmaciónLa tendencia a buscar información que respalde nuestras creencias existentes y evitar información que las desafíe.
Sesgo de DisponibilidadLa tendencia a sobrevalorar la importancia de la información que está fácilmente disponible para nosotros.
Sesgo de AnclajeLa tendencia a basar nuestras evaluaciones o decisiones en información inicial, incluso si esa información es irrelevante o incorrecta.

Es importante reconocer los sesgos cognitivos en nosotros mismos y en los demás para poder tomar decisiones racionales y objetivas. Utilizando técnicas como el pensamiento crítico y la reflexión consciente, podemos aprender a superar estos patrones de pensamiento y tomar decisiones más informadas.

 

Aquí te presento un listado extenso de sesgos cognitivos comunes que pueden influir en la toma de decisiones:

  1. Sesgo de confirmación: Tendencia a buscar, interpretar o recordar información de manera que confirma nuestras creencias previas.
  2. Efecto anclaje: Dependencia excesiva en la primera pieza de información recibida (el «ancla») al tomar decisiones.
  3. Sesgo de disponibilidad: Sobrestimar la importancia de la información que está más disponible en nuestra memoria.
  4. Sesgo de representatividad: Juzgar la probabilidad de un evento basándose en cuánto se asemeja a un caso típico.
  5. Sesgo de retrospectiva: Ver eventos pasados como más predecibles de lo que eran antes de que ocurrieran.
  6. Sesgo de optimismo: Tendencia a creer que somos menos propensos a experimentar eventos negativos.
  7. Efecto Dunning-Kruger: Tendencia de las personas poco calificadas a sobreestimar su habilidad.
  8. Efecto de falso consenso: Sobreestimar cuánto los demás comparten nuestras creencias y comportamientos.
  9. Sesgo de auto-servicio: Atribuir el éxito a factores internos y el fracaso a factores externos.
  10. Sesgo de confirmación de hipótesis: Buscar y favorecer información que confirme nuestras hipótesis o expectativas.
  11. Sesgo de grupo: Tendencia a pensar y actuar de manera similar dentro de un grupo, ignorando diferentes perspectivas.
  12. Sesgo de status quo: Preferir que las cosas permanezcan como están y resistir al cambio.
  13. Falacia de costo hundido: Continuar una empresa desfavorable debido a la inversión significativa ya realizada.
  14. Sesgo de acción: La preferencia por la acción sobre la inacción, en situaciones donde actuar podría ser perjudicial.
  15. Sesgo de sobrevivencia: Concentrarse en los éxitos ignorando los ejemplos de fracasos que no se observan.
  16. Efecto halo: La influencia de una impresión global sobre las evaluaciones de características específicas de una persona o situación.
  17. Sesgo de confirmación de creencia: Mantener una creencia a pesar de las evidencias en contra.
  18. Efecto de falsa unicidad: Creer que nuestras habilidades y logros son más únicos y raros de lo que realmente son.
  19. Sesgo de enmarcado: Tomar decisiones diferentes según cómo se presenta la información o el contexto.
  20. Sesgo de ilusión de control: La tendencia a sobreestimar nuestra habilidad para controlar eventos.
  21. Efecto de punto ciego del sesgo: Falta de reconocimiento de los propios sesgos cognitivos.

Estos sesgos cognitivos son solo algunos de los muchos que pueden afectar la toma de decisiones en diversas situaciones. Conocerlos y ser consciente de ellos puede ayudar a mitigar su impacto en nuestras decisiones y juicios.

Toma de Decisiones Impulsivas

Los sesgos cognitivos pueden afectar nuestra capacidad para tomar decisiones racionales, llevándonos a tomar decisiones impulsivas o basadas en emociones. Un ejemplo común de este tipo de decisión es la compra impulsiva, cuando compramos algo que no necesitamos solo porque nos parece atractivo en ese momento. Las técnicas de neuromarketing se basan en esta debilidad.

Creemos que las personas analizan su realidad con un pensamiento racional, pero nada más lejos de lo habitual. En este artículo sobre la falacia del pensamiento secuencial tratamos este mismo tema de forma extensa.

Es importante tener en cuenta que la toma de decisiones impulsivas puede tener consecuencias negativas en nuestras finanzas, relaciones interpersonales y bienestar emocional.

Una estrategia efectiva para evitar este patrón de comportamiento es tomarse el tiempo para reflexionar antes de tomar una decisión. Si nos damos un momento para pensar en las posibles consecuencias y en la racionalidad de nuestra elección, podemos evitar caer en la tentación de una decisión impulsiva.

Consejos para evitar la toma de decisiones impulsivas:

Tomar decisiones de manera racional y objetiva no siempre es fácil, pero al evitar las decisiones impulsivas podemos mejorar nuestra capacidad para tomar decisiones informadas y acertadas.

Toma de Decisiones Racionales

Tomar decisiones racionales es fundamental para evitar los efectos negativos de los sesgos cognitivos en nuestro proceso de toma de decisiones. Para hacerlo, es necesario explorar técnicas y estrategias que nos permitan tomar decisiones basadas en la lógica y la evidencia.

Ten en cuenta que la objetividad y subjetividad en el ser humano son dos polos engañosos de nuestra forma de pensar porque, en realidad, la objetividad no existe en la esencia de nuestra naturaleza.

Una de estas técnicas es la valoración de la calidad de la información. Al momento de tomar una decisión, es importante evaluar la calidad de la información disponible y su relevancia para el problema en cuestión. De esta manera, podemos reducir la influencia de información parcial o engañosa.

Otra técnica útil es la de la «doble verificación». Al tomar una decisión importante, es beneficioso tomarse el tiempo necesario para reflexionar acerca de ella y asegurarse de que se han considerado todas las perspectivas relevantes. Además, es recomendable pedir opinión a alguien más, que pueda aportar una visión diferente y objetiva.

Un tercer enfoque es el de la «toma de decisiones basadas en la evidencia». Esta técnica implica recopilar y evaluar evidencias que respalden o refuten una decisión, y tomar la determinación en base a estos datos. De esta manera, se evita caer en decisiones basadas en prejuicios o estereotipos.

Usando estas técnicas, podemos superar los sesgos cognitivos y tomar decisiones más acertadas. Además, también es importante ser conscientes de nuestros propios prejuicios y aprender a manejarlos de manera efectiva.

«Tomar decisiones racionales implica valorar la calidad de la información, reflexionar y considerar diferentes perspectivas, y tomar decisiones basadas en evidencias.»

Técnicas para la Toma de Decisiones Racionales

Para tomar decisiones de manera más racional, es recomendable aplicar algunas técnicas que nos permitan evitar los sesgos cognitivos. Algunas de estas técnicas son:

Tabla Comparativa: Toma de Decisiones Racionales vs. Toma de Decisiones Basadas en Sesgos Cognitivos

Toma de Decisiones RacionalesToma de Decisiones Basadas en Sesgos Cognitivos
Enfoque principalToma de decisiones basadas en la lógica y las evidenciasToma de decisiones basadas en prejuicios y estereotipos
Proceso de toma de decisionesEvaluación de la información relevante, reflexión y consideración de diferentes perspectivasReacción impulsiva frente al estímulo
ResultadosDecisiones acertadas y objetivasDecisiones parciales y emocionales

Heurísticas y Sesgos en la Toma de Decisiones

La mayoría de nosotros tomamos decisiones basadas en reglas mentales simplificadas, o heurísticas, que nos sirven como atajos para tomar decisiones rápidas. Sin embargo, estas heurísticas pueden llevarnos a cometer sesgos cognitivos, que nos hacen tomar decisiones ilógicas o irreflexivas.

En este mismo sitio tienes un artículo sobre los errores y mitos del razonamiento informal. En él pongo de manifiesto el modo en que la mente nos engaña.

Por ejemplo, la heurística de representatividad, en la que asumimos que un objeto o persona representa una clase o categoría más grande, puede llevarnos a ignorar otras características importantes al tomar decisiones. O la heurística de disponibilidad, que nos lleva a evaluar la probabilidad de un evento en función de cuánto tiempo hemos pasado pensando en él, en lugar de basarnos en una evaluación más objetiva.

Al ser conscientes de estas heurísticas y sesgos, podemos tomar decisiones más informadas y racionales. Sin embargo, identificar estos patrones puede ser difícil, especialmente si no estamos preparados para cuestionar nuestras propias ideas preconcebidas.

Para ayudarnos a identificar y superar estos patrones, es útil hacer preguntas básicas sobre nuestros procesos de pensamiento. Preguntarnos cosas como «¿Estoy tomando esta decisión basándome en la evidencia, o en una suposición implícita?» o «¿Estoy tomando en cuenta todas las perspectivas relevantes, o solo las que respaldan mi punto de vista?» puede ayudarnos a evitar los errores cognitivos y tomar decisiones más racionales y fundamentadas.

Errores Cognitivos en la Toma de Decisiones

Al tomar decisiones, podemos cometer errores cognitivos que afectan nuestro juicio y conducen a resultados equivocados. Estos errores pueden deberse a nuestra forma de pensar, a nuestro estado emocional o a nuestras experiencias previas.

Es importante conocer los errores más comunes para poder evitarlos y tomar decisiones más acertadas. Aquí presentamos algunos ejemplos:

ErrorDescripción
Sesgo de ConfirmaciónTendencia a buscar información que confirme nuestras creencias y a ignorar la que las contradice.
Heurística de DisponibilidadTendencia a dar más peso a la información que se nos viene a la mente con más facilidad, independientemente de su relevancia o veracidad.
Sesgo de NegatividadTendencia a dar más importancia a los aspectos negativos de una situación o opción que a los aspectos positivos.

Para evitar estos errores cognitivos, podemos:

Al minimizar nuestros errores cognitivos, podemos tomar mejores decisiones y lograr mejores resultados en nuestras vidas. Lo importante es que hablamos de minimizar, no de eliminar errores, porque va en nuestra naturaleza equivocarnos, y eso es inevitable.

La Influencia de los Sesgos Cognitivos en la Toma de Decisiones

Los sesgos cognitivos pueden afectar significativamente nuestro proceso de toma de decisiones en distintos contextos, ya sea en situaciones personales, profesionales o sociales. Es importante comprender cómo estos sesgos influyen en nuestro pensamiento y cómo evitar que afecten negativamente nuestras decisiones.

Una forma en que los sesgos cognitivos pueden afectar nuestra toma de decisiones es a través de la heurística de representatividad. Esta heurística implica que tendemos a juzgar la probabilidad de que algo ocurra en función de lo bien que se ajuste a nuestras expectativas previas de cómo debería ser algo. Por ejemplo, si tenemos una idea preconcebida sobre cierto grupo de personas, podemos tener sesgos cognitivos que nos lleven a tomar decisiones equivocadas basadas en esa idea previa.

Otro sesgo cognitivo que puede influir en la toma de decisiones es el efecto anclaje. Este efecto puede ocurrir cuando nos fijamos en un valor o cifra específica que nos «ancla» a una determinada perspectiva. Por ejemplo, si en una negociación el primer precio que se ofrece es muy alto, es posible que el comprador tenga un sesgo cognitivo que lo lleve a pensar que cualquier otro precio será más razonable, incluso si ese precio es todavía demasiado alto.

Para evitar los efectos negativos de los sesgos cognitivos en nuestra toma de decisiones, es importante estar conscientes de ellos y utilizar técnicas como el pensamiento crítico para analizar las diferentes opciones y perspectivas. También podemos consultar a otras personas y buscar información objetiva que nos ayude a tomar decisiones informadas y racionales.

Tabla de Ejemplos de Sesgos Cognitivos y su Influencia en la Toma de Decisiones

Sesgo CognitivoInfluencia en la Toma de Decisiones
Sesgo de ConfirmaciónPuede llevar a descartar información que contradice nuestras creencias previas, lo que puede limitar nuestro pensamiento crítico.
Sesgo de DisponibilidadPuede hacer que demos más peso a la información que está disponible y fácilmente accesible, en lugar de considerar todas las opciones de manera equitativa.
Sesgo de AnclajePuede llevar a fijarnos en una sola perspectiva o opción debido a un valor o cifra específica que nos «ancla» a esa perspectiva.

Psicología de la Toma de Decisiones

La toma de decisiones es un proceso complejo que implica un conjunto de factores no siempre evidentes. En esta sección, exploraremos cómo la psicología influye en la toma de decisiones y cómo podemos tener esto en cuenta para mejorar nuestra capacidad para tomar decisiones efectivas.

Nuestras emociones, creencias y valores son algunos de los factores que influyen en la toma de decisiones. Por ejemplo, podemos tener una tendencia a tomar decisiones basadas en nuestras emociones y sentimientos, más que en la lógica y la razón. A veces, nuestras creencias y valores personales pueden distorsionar nuestro análisis y llevarnos a tomar decisiones inadecuadas.

Es importante ser conscientes de estos factores para poder manejarlos de manera adecuada y tomar decisiones más racionales y objetivas. Al tener en cuenta nuestra psicología, podemos desarrollar un pensamiento crítico más sólido y tomar decisiones basadas en la evidencia disponible, en lugar de nuestras emociones o prejuicios.

Un aspecto clave de la psicología de la toma de decisiones es la capacidad de reconocer la incertidumbre y la complejidad inherentes al proceso. En lugar de buscar soluciones sencillas o instantáneas, debemos estar dispuestos a explorar diferentes opciones y considerar diferentes perspectivas. Esto nos permite tomar decisiones más informadas y acertadas.

En resumen, la comprensión de la psicología detrás de la toma de decisiones puede ser de gran ayuda para mejorar nuestras capacidades en este ámbito. Al ser conscientes de cómo nuestras emociones y creencias influyen en nuestra toma de decisiones, podemos desarrollar un pensamiento crítico más sólido y tomar decisiones más acertadas y fundamentadas.

Estrategias para una Toma de Decisiones más Racional

Para tomar decisiones de manera más racional, es necesario desarrollar nuestro pensamiento crítico y ser conscientes de los sesgos cognitivos que pueden influir en nuestras decisiones. Aquí presentamos algunas estrategias que pueden ayudarnos:

Con estas estrategias podemos mejorar nuestra capacidad para tomar decisiones de manera más racional y objetiva. Recuerda, la toma de decisiones es un proceso complejo que requiere práctica y reflexión constante.

Si la decisión es verdaderamente importante, entonces sigue el modelo de decisión que te dejo en este artículo sobre el modelo de planificación estratégica paso a paso.

Cómo Identificar los Sesgos Cognitivos

Los sesgos cognitivos pueden ser difíciles de identificar, pero es importante aprender a reconocerlos para poder tomar decisiones más informadas y objetivas. A continuación, se presentan algunas señales de alerta que sugieren que puede haber un sesgo cognitivo en juego:

Para combatir estos sesgos cognitivos en la toma de decisiones, es necesario cuestionarnos nuestras decisiones y analizarlas cuidadosamente. Aquí hay algunas preguntas que podemos hacernos:

  1. ¿Estoy considerando todas las evidencias disponibles?
  2. ¿Estoy cayendo en la trampa del pensamiento grupal?
  3. ¿Estoy dejando que mis emociones influyan en mi toma de decisiones?
  4. ¿Estoy aplicando estereotipos o prejuicios a esta persona o situación?

Al hacernos estas preguntas, podemos identificar los sesgos cognitivos y trabajar para superarlos. Además, es útil tener en cuenta que todos somos propensos a experimentar sesgos cognitivos de vez en cuando, por lo que es importante ser conscientes de ellos y trabajar constantemente en nuestra toma de decisiones.

Cómo Evitar los Sesgos Cognitivos

Para evitar caer en los sesgos cognitivos al tomar decisiones, es importante tener en cuenta algunas técnicas y enfoques que nos ayudarán en este proceso. Una de ellas es la reflexión, deteniéndonos a analizar nuestras propias ideas y juicios para cuestionar su validez y evitar caer en prejuicios erróneos.

Otro enfoque útil es la apertura a nuevas perspectivas, buscando diferentes puntos de vista y considerando posibles alternativas a nuestra forma de pensar. De esta manera, ampliamos nuestra visión y nos acercamos a una toma de decisiones más objetiva.

Por último, es recomendable emplear siempre la búsqueda de información objetiva y contrastada, verificando fuentes y argumentos para tener una perspectiva más completa y rigurosa.

Recuerda que al evitar los sesgos cognitivos en nuestro proceso de toma de decisiones, estamos consiguiendo decisiones más acertadas y justas para nosotros mismos y para los demás.

Conclusión

En conclusión, los sesgos cognitivos son una realidad inevitable en nuestro proceso de toma de decisiones. Pero, es importante ser conscientes de su existencia para poder minimizar su influencia en nuestras decisiones.

A través de este artículo, hemos explorado diferentes tipos de sesgos cognitivos y cómo pueden afectar nuestras decisiones, tanto a nivel personal como profesional. Además, hemos aprendido técnicas y estrategias para mejorar nuestro pensamiento crítico y tomar decisiones más racionales y fundamentadas.

En resumen, la toma de decisiones es un proceso complejo que está influenciado por múltiples factores internos y externos. Pero, con la práctica y la reflexión, podemos ser más conscientes de nuestros sesgos cognitivos y mejorar nuestra capacidad para tomar decisiones más acertadas.

Recuerda, mantener la mente abierta a nuevas perspectivas y la búsqueda de información objetiva son claves para evitar los sesgos cognitivos en la toma de decisiones.

FAQ

¿Qué son los sesgos cognitivos?

Los sesgos cognitivos son patrones sistemáticos de pensamiento que pueden influir en nuestras decisiones y juicios. Son errores o atajos mentales que tomamos inconscientemente y que afectan nuestra objetividad y racionalidad al tomar decisiones.

¿Cómo afectan los sesgos cognitivos en la toma de decisiones impulsivas?

Los sesgos cognitivos pueden llevarnos a tomar decisiones impulsivas al dar mayor peso a la emoción y al instinto en lugar de analizar racionalmente la situación. Estos sesgos pueden hacernos subestimar riesgos, ignorar información relevante y guiarnos por prejuicios o estereotipos.

¿Cómo puedo tomar decisiones más racionales?

Para tomar decisiones más racionales, es importante ser consciente de los sesgos cognitivos y utilizar técnicas de pensamiento crítico. Esto implica considerar diferentes perspectivas, evaluar evidencias de manera objetiva, evitar reacciones impulsivas y tener en cuenta tanto los aspectos emocionales como los lógicos de la situación.

¿Qué son las heurísticas y cómo influyen en la toma de decisiones?

Las heurísticas son atajos mentales o reglas generales que utilizamos para tomar decisiones rápidas y eficientes. Sin embargo, estas heurísticas también pueden llevarnos a cometer errores cognitivos al simplificar la información y no considerar todas las variables relevantes en una situación.

¿Cuáles son algunos errores cognitivos comunes en la toma de decisiones?

Algunos errores cognitivos comunes en la toma de decisiones incluyen el sesgo de confirmación (buscar información que respalde nuestras creencias), la aversión a la pérdida (evitar riesgos por miedo a perder) y el efecto de encuadre (tomar decisiones basadas en cómo se presenta la información). Estos errores pueden distorsionar nuestro juicio y llevar a decisiones subóptimas.

¿Cómo puedo identificar y evitar los sesgos cognitivos?

Para identificar y evitar los sesgos cognitivos, es importante ser consciente de nuestros propios pensamientos y emociones al tomar decisiones. Podemos cuestionar nuestros sesgos al considerar diferentes perspectivas, buscar información objetiva, buscar opiniones contrarias y reflexionar de manera crítica sobre nuestro razonamiento.

¿Cuál es la influencia de los sesgos cognitivos en diferentes contextos de toma de decisiones?

Los sesgos cognitivos pueden influir en nuestras decisiones tanto en el ámbito personal como profesional y social. Pueden afectar nuestras interacciones con otras personas, nuestras decisiones financieras, nuestras elecciones laborales y nuestras decisiones de salud, entre otros aspectos de nuestras vidas.

¿Cómo puedo mejorar mi pensamiento crítico en la toma de decisiones?

Para mejorar tu pensamiento crítico en la toma de decisiones, puedes practicar la evaluación objetiva de evidencias, cuestionar tus propias creencias y prejuicios, buscar diferentes perspectivas y considerar el contexto en el que se toma la decisión. También puedes buscar información confiable y consultar a expertos en el tema.

¿Cuáles son algunas estrategias para tomar decisiones más racionales?

Algunas estrategias para tomar decisiones más racionales incluyen analizar los pros y contras de cada opción, establecer criterios claros, buscar información relevante, considerar diferentes perspectivas, tomar tiempo para reflexionar y consultar a otras personas de confianza.

¿Cuál es la importancia de ser consciente de los sesgos cognitivos?

Ser consciente de los sesgos cognitivos en la toma de decisiones es importante porque nos permite cuestionar nuestras propias decisiones y evitar errores cognitivos. Al comprender cómo estos sesgos influyen en nuestro pensamiento, podemos mejorar nuestra toma de decisiones, tanto a nivel individual como colectivo.

¿Cuál es la relación entre los sesgos cognitivos y el proceso de toma de decisiones?

Los sesgos cognitivos pueden influir en el proceso de toma de decisiones al desviar nuestra atención de la información relevante, distorsionar nuestra percepción de la realidad y llevarnos a decisiones basadas en prejuicios o estereotipos. Reconocer y abordar estos sesgos es fundamental para tomar decisiones más racionales y acertadas.

Bibliografía recomendada

Aunque en este tema es absolutamente imprescindible leer a Kahneman y Tversky, dejo algunos trabajos de estos autores y algunos otros que me parecen sumamente interesantes y clarificadores.

  1. Kahneman, D. (2011). Thinking, Fast and Slow. New York: Farrar, Straus and Giroux. Este libro, escrito por un premio Nobel de Economía, explora en profundidad cómo los dos sistemas de pensamiento (rápido e intuitivo vs. lento y racional) moldean nuestras decisiones y la presencia de sesgos cognitivos.
  2. Tversky, A., & Kahneman, D. (1974). Judgment under Uncertainty: Heuristics and Biases. Science, 185(4157), 1124-1131. Un artículo fundamental que introdujo muchos conceptos clave en el estudio de los sesgos cognitivos.
  3. Ariely, D. (2008). Predictably Irrational: The Hidden Forces That Shape Our Decisions. New York: HarperCollins. Ariely ofrece una perspectiva accesible y entretenida sobre cómo las expectativas, las emociones y los factores sociales influyen en nuestras decisiones económicas.
  4. Thaler, R. H., & Sunstein, C. R. (2008). Nudge: Improving Decisions About Health, Wealth, and Happiness. New Haven, CT: Yale University Press. Este libro introduce el concepto de «nudging» como una forma de influir en las decisiones de las personas de una manera que mejore sus resultados de salud y bienestar.
  5. Gilovich, T., Griffin, D., & Kahneman, D. (Eds.). (2002). Heuristics and Biases: The Psychology of Intuitive Judgment. New York: Cambridge University Press. Una colección de ensayos que cubren una amplia gama de investigaciones sobre heurísticas y sesgos en la toma de decisiones.
  6. Plous, S. (1993). The Psychology of Judgment and Decision Making. New York: McGraw-Hill. Plous ofrece una visión general comprensiva y accesible de la investigación en la toma de decisiones y los sesgos cognitivos.
  7. Bazerman, M. H., & Moore, D. A. (2008). Judgment in Managerial Decision Making. New York: Wiley. Este libro se enfoca en cómo los sesgos cognitivos afectan las decisiones en el entorno empresarial.
  8. Jolls, C., Sunstein, C. R., & Thaler, R. (1998). A Behavioral Approach to Law and Economics. Stanford Law Review, 50(5), 1471-1550. Un artículo influyente que aplica la teoría de los sesgos cognitivos y la economía del comportamiento al campo del derecho.
  9. Lovallo, D., & Kahneman, D. (2003). Delusions of Success: How Optimism Undermines Executives’ Decisions. Harvard Business Review, 81(7), 56-63. Este artículo analiza cómo el exceso de optimismo y otros sesgos cognitivos pueden llevar a decisiones empresariales pobres.
  10. Fischhoff, B. (1975). Hindsight ≠ Foresight: The Effect of Outcome Knowledge on Judgment Under Uncertainty. Journal of Experimental Psychology: Human Perception and Performance, 1(3), 288-299. Un estudio clásico sobre el sesgo de retrospectiva y cómo afecta nuestra percepción de los eventos pasados.

Estas referencias proporcionan una base sólida para entender la importancia de los sesgos cognitivos en la toma de decisiones desde diferentes perspectivas, incluyendo la psicología, la economía y la administración. Muchos de ellos tienen ediciones en español.

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